Mantenimiento del césped en verano. Consejos a seguir para disfrutar de tu jardín en los meses de calor. No olvides hacer el mantenimiento adecuado.
A mediados de primavera suele ser una época donde empieza a hacer un tiempo caluroso y donde nos queda un verano todo por delante para poder disfrutar de nuestro jardín con nuestra familia. Así, el césped natural nos transmite un frescor que se agradece con el aumento de las temperaturas de esos meses.
Pues bien, para el mantenimiento del césped en óptimas condiciones os damos unas pautas a seguir para que el césped de Tepes Julián se mantenga de color verde intenso y en perfectas condiciones. Como todos sabemos, el mantenimiento es fundamental y por eso hemos de trabajárnoslo y, luego, lo agradecerás.
El mantenimiento básico consiste en realizar las siguientes tareas seguidas en este orden: siega, abono y riego.
En primer lugar, la siega consiste en cortar el césped a una altura de unos 3 centímetros mediante cortacésped eléctrico o de gasolina (dependiendo de los metros cuadrados que tengamos). Es muy importante no cortarlo demasiado porque dañaríamos en gran medida el césped natural y provocaría zonas amarillentas ya que el sol radiaría con mayor intensidad a las raíces de las hojas del césped. De igual modo, no es conveniente dejarlo demasiado largo. Un césped con un corte adecuado hace que la tierra esté más tiempo húmeda porque evita que le dé directamente el sol.
La frecuencia de siega ha de ser aproximadamente cada 10 días en verano y cada 20 días en invierno. Es fundamental el correcto afilado de la cuchilla del cortacésped.
En segundo lugar, debemos abonar el césped en los meses de primavera, verano y hasta mediados del otoño cada 20-30 días. Debemos tener mucho cuidado con la distribución del abono sobre el terreno porque si hay mucho abono concentrado, podríamos provocar quemaduras en el césped. La proporción de abono a nutrir sería entorno a 25 gramos por cada metro cuadrado. Los mínimos nutrientes que debe tener el abono complejo son nitrógeno, fósforo y potasio en unas proporciones de 12%, 11% y 18%, respectivamente.
Por último, una vez realizado las tareas de siega y abono, nos falta una principal y que en verano lo debemos hacer diariamente unas 2 o 3 veces al día y es el riego. La primera semana de instalación de los tepes, el riego ha de ser continuo hasta 4 veces al día. Es preferible dar muchos riegos durante poco tiempo, así el terreno está húmedo durante todo el día. Así debemos estar entorno a 10 días. Por otra parte, bajo ningún concepto debemos regar el césped con manguera ya que no echaremos la misma cantidad de agua por todo nuestro especio verde. Así, aconsejamos que se haga con riego automático mediante aspersores. La duración depende de la zona geográfica y de otras características como la calidad de la tierra, de la humedad, de la temperatura, etc. La principal causa de la sequedad del césped de los jardines es por falta de riego. El césped es una planta, sin agua, se muere.
Si cumplimos todas estas recomendaciones, tendremos el jardín en perfectas condiciones de mantenimiento. De esta manera podremos disfrutar del césped y pasar un fantástico verano con nuestra familia y amigos.