Cómo realizar el mantenimiento en los meses de invierno. Qué debemos hacer para realizar un correcto mantenimiento del césped natural en otoño y en invierno.
En septiembre u octubre son los meses ideales para airear el suelo o realizar el escarificado para, posteriormente, realizar la resiembra del césped. También es muy buena época para la siembra y para la plantación de los rollos de césped, aunque éste último se puede realizar en cualquier época del año. Es la ventaja de los tepes frente a la siembra.
El aireado consiste en realizar agujeros en el terreno para oxigenar la tierra y que el agua llegue hasta la tierra para evitar encharcamientos de césped y, en consecuencia, la aparición de enfermedades.
Los meses del otoño son meses donde árboles empiezan a perder las hojas. Para evitar daños en el jardín, debemos recogerlas con cierta frecuencia. Por otro lado, debemos seguir abonando el césped hasta el mes de noviembre. Luego en invierno detendremos la dosis para, luego, en primavera, empezar otra vez con el abonado para un mejor mantenimiento del césped natural.
Con el inicio de las lluvias en estos meses, debemos ir reduciendo las siegas y el riego. Si el césped está húmero no es recomendable pasar el cortacésped hasta que no esté completamente seco.
Prácticamente a final del otoño y principios del invierno el mantenimiento del césped es mínimo. Por tanto, es buena época para realizar el mantenimiento de la maquinaria que hemos usado durante el año. Entre otras tareas, debemos limpiar de forma general el cortacésped, engrase, ajustes de tornillos, bujías, vaciar los depósitos de aceite y gasolina, extraer la batería y guardar el cortacésped en un lugar seco.
Por último, en los meses de invierno, no hace falta hacer ningún mantenimiento. Con las heladas fuertes, se recomienda pasar un rulo para afirmar el terreno. También, antes de que llegue la primavera, hay que ir realizando la primera siega y evaluar si es necesario echar algún tipo de fungicida o herbicida.